Los bebés que reciben leche materna en sus primeros meses generalmente tienen mejores notas que los que se alimentan con biberón, según aseguró un estudio publicado por la revista “Journal of Human Capital”.

Su mejor rendimiento escolar básico también se traduce en mayores posibilidades de buenas calificaciones en los estudios secundarios y en la universidad, dijeron los especialistas.

La investigación, realizada por profesores de la Universidad Americana y de la Universidad de Colorado, analizó el rendimiento de 126 niños que fueron amamantados con un número similar alimentado solo con biberón.

Los datos determinaron que por un mes de lactancia esos niños registraron un mejor rendimiento medio en la escuela secundaria. Por otra parte, las probabilidades de lograr el ingreso a la universidad también aumentaron.

“Los resultados sugieren que los beneficios intelectuales y de salud (de la lactancia) pueden tener como resultado beneficios educacionales a largo plazo para los niños”, enfatizó uno de los autores.



Los aneurismas aórticos surgen por enfermedades o condiciones como la arterioesclerosis, infecciones, trauma por un accidente automovilístico y hasta por el estrés emocional que aumenta la presión arterial o la dilatación de las paredes de la aorta.

Usualmente no presentan síntomas, pero hay pacientes en los que se manifiesta con dolor de pecho, de espalda o falta de aire; y en casos raros, alteración en el tono de la voz, debido a que el abultamiento de esta arteria comprime un nervio de las cuerdas vocales.

El médico Gonzalo Carrizo, cirujano cardiaco y vascular, afiliado al Kendall Regional Medical Center, en Miami, explica que si el aneurisma es menor de cinco centímetros y no presenta síntomas, no es necesario intervenir quirúrgicamente. Pero si tiene un crecimiento muy acelerado se recomienda operarlo, pues de llegar a romperse este “globo” de sangre, las consecuencias pueden ser, incluso, fatales.

Opciones de tratamiento

Se puede tratar la cirugía abierta o cateterismo con stents, un procedimiento bastante invasivo, porque incluye abrir el tórax y, en muchas oportunidades, utilizar una máquina de circulación extracorpórea.

Los aneurismas que se presentan en la aorta descendente (en el tórax y el abdomen) se pueden tratar de manera mínima invasiva, implantando un stent por medio de un catéter, que se introduce por una pequeña incisión de tres a cuatro centímetros en la ingle y se lleva por dentro de la arteria femoral hasta la aorta, en la cual se deja permanentemente. En este caso no se remplaza la arteria, simplemente se introduce en ella el stent y se deja allí.

Estas mallitas son de un material metálico recubierto de un polietileno especial que no hace ningún daño al cuerpo. Estas mallitas no presentan los problemas que pueden ocurrir cuando se implantan en las arterias coronarias del corazón. La razón es que la aorta es mucho más ancha que las coronarias, así que la sangre fluye por su interior con más amplitud.



Una dieta equilibrada supone un beneficio para la fertilidad masculina. Comer pocas frutas y verduras se asocia con una baja capacidad reproductora del semen, según los resultados de un estudio que publica el último número de la revista Fertility and Sterility, en el que han participado investigadores de la Universidad de Murcia, la Universidad Miguel Hernández, el Centro de Investigación Biomédica en Red de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) y el Instituto Bernabeu de Alicante. Según la investigación, el consumo de estos alimentos, ricos en antioxidantes, retarda o previene la oxidación de otras moléculas.

El equipo español lleva cuatro años analizando la asociación entre hábitos dietéticos y ocupacionales y la calidad del semen en varones que acuden a clínicas de fertilidad en España. El estudio se ha realizado con 61 hombres que acudieron a alguna de estas clínicas con su pareja, 30 de ellos con problemas reproductivos. Los investigadores pudieron ver que los individuos sin problemas, es decir, con una buena calidad seminal, consumían más verduras y frutas y, por tanto, más vitaminas, ácido fólico y fibra y menos proteínas y grasas.

Cítricos y pimientos

En definitiva, comer alimentos como los cítricos, los pimientos o las espinacas baja el nivel de estrés oxidativo que interviene en la calidad seminal. En quienes toman más vegetales y frutas se registran valores superiores en parámetros determinantes a la hora de valorar la calidad seminal: la concentración, la movilidad y la morfología de los espermatozoides.

El pasado mes de marzo el mismo equipo publicó los resultados de otra investigación en la que mostraban que los hombres que comían mucha carne y lácteos grasos tenían una menor calidad seminal que aquellos que consumían más frutas, verduras y lácteos desnatados. Las grasas acumulan tóxicos y contaminantes que podrían estar detrás de esta disminución de la calidad seminal.

Cada vez hay más estudios que indican que la fecundidad masculina ha disminuido durante las últimas décadas. Muchos apuntan a que la exposición a tóxicos y contaminantes a través de la dieta u otros factores ambientales puede comprometer la capacidad reproductiva del varón incluso antes de nacer si su madre vivió durante su embarazo en un entorno contaminado.

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